Según estudios relacionados a la alimentación, llevar una dieta nutricionalmente equilibrada, ya sea alterando el consumo de calorías o el horario de las comidas puede producir un retraso en la aparición y progresión de las enfermedades, junto con una vida larga y saludable.
Estudios de nutrición han corroborado que el ayuno es una estrategia de alimentación de gran utilidad para bajar de peso de manera segura, además de tener grandes probabilidades de traer más beneficios al cuerpo. Sin embargo, cualquiera de estas estrategias se debe ejecutar con la asesoría profesional, para notar y supervisar los cambios en el cuerpo ya que estas tienen contraindicaciones que advierten sobre reacciones adversas o no deseadas en algunas personas.
Desde una perspectiva evolutiva, el ayuno es natural y ha estado presente desde la antigüedad, tanto en el ser humano como en otros organismos. No obstante, los tiempos han cambiado y aunque algunos animales silvestres aún pasan un tiempo con poca o ninguna comida, los humanos, que somos en gran mayoría sedentarios y tenemos la opción de comer cuando queramos, hemos dejado de lado esa práctica.
El ayuno intermitente
Es un sistema que maneja ciclos regulares en los que se consume ninguna o pocas calorías, seguido por un periodo de alimentación. El ayuno intermitente es más conocido como Intermittent Fasting (IF) o ayuno terapéutico, aunque no es reconocido como una dieta en toda su plenitud, es usado como modelo nutricional para personas con diabetes o para gente que quiera bajar de peso.
Según estudios realizados en animales y en humanos, el ayuno intermitente es capaz de provocar respuestas celulares adaptativas y evolutivamente conservadas que mediante un proceso de integración en los órganos, mejoran la regulación de la glucosa, la presión sanguínea, la frecuencia cardíaca y suprimen la inflamación.
En el artículo "Efectos del ayuno intermitente en la salud, Envejecimiento y enfermedad", publicado por Rafael de Cabo y Mark Mattson en la revista de medicina de Nueva Inglaterra, se menciona que el estar expuesto constantemente a ciclos de ayuno intermitente, hace que el organismo experimente un proceso adaptativo que lo ayuda a enfrentarse a los retos posteriores, aumentando la resistencia al estrés.
Tipos de IF:
16/8: funciona alternando ciclos de 16 horas de ayuno, con 8 horas de alimentación (cabe aclarar que se debe mantener una alimentación saludable y que no es necesario estar comiendo las 8 horas)
12/12: igual que en el anterior se alterna entre 12 horas de ayuno y 12 de ingesta de calorías o alimentos.
Día alterno modificado: un día me alimento al 100%, al otro reduzco las calorías en un 60%
Dia alterno: un día ayuno, al otro me alimento con normalidad, teniendo en cuenta una alimentación saludable
2 a la semana: Ayuno dos días por semana, continuando los otros días con el consumo regular.
Nota: Los últimos dos no son recomendados ya que pueden dejar repercusiones en el cuerpo a largo plazo.
Finalmente recuerda que durante el ayuno puedes tomar agua, té o infusiones y que si realizas alguna dieta o modelo de alimentación lo mejor es tener la respectiva asesoría
médica para no caer en daños a la salud y por tapar un agujero, crear uno más grande.
Referencias:
Encinas, A. F. Ayuno intermitente: qué es, cómo hacerlo y beneficios probados En este tipo de alimentación la persona pasa por diferentes ciclos de ayuno para perder peso.
Di Francesco, A., Di Germanio, C., Bernier, M. y de Cabo, R. (2018). Un tiempo para ayunar. Science , 362 (6416), 770-775.
Peiró, P. S. (2017). Ayuno intermitente. Medicina naturista, 11(1), 3-8.
de Cabo, R. y Mattson, MP (2019). Efectos del ayuno intermitente sobre la salud, el envejecimiento y la enfermedad. Revista de Medicina de Nueva Inglaterra , 381 (26), 2541-2551.
Muy interesante.
Muy interesante